Debido a las altas temperaturas que se están presentando en la ciudad, comerciantes están cuidando aún más la refrigeración de sus alimentos con base a las recomendaciones de la Secretaria de Salud en el manejo de los mismos.
Locatarios indican que en el caso de las pescaderías, han tenido que invertir más recurso en la compra de hielo para mantener fresco el producto y en carnicerías, los refrigeradores se mantienen prendidos las 24 horas y en vigilancia de que estén enfriando correctamente, para conservar la carne en buen estado.
En el caso de las frutas y verduras, se mantienen ventiladas y se humedecen a fin de evitar que el calor las afecte y deshidrate más rápido de lo habitual, por lo que la venta de estas es importante para no registrar pérdidas.
Se dicen preocupados, ya que a pesar de ser una situación de todos los años, la diferencia es que cada periodo se acentúan aún más las temperaturas y los alimentos perecederos se ven aún más afectados.
